Escalda la albahaca en agua hirviendo durante un minuto.
Retira y sumerge inmediatamente en un bol con agua y hielo para detener la cocción.
Escurre y seca bien las hojas de albahaca.
En el vaso de la batidora, añade aceite de oliva virgen extra y las hojas de albahaca.
Bate hasta obtener un aceite de color verde intenso. Resérvalo.
Lava y corta las berenjenas, calabacines y tomates en rodajas de aproximadamente medio centímetro de grosor.
Calienta una parrilla y añade un chorrito de aceite.
Coloca las rodajas de berenjena, calabacín y tomate en la parrilla y cocínalas hasta que estén tiernas. Retíralas y resérvalas.
Corta la mozzarella en rodajas del mismo grosor que las verduras.
En una picadora, añade las aceitunas negras, los tomates secos con su jugo, el diente de ajo, una pizca de sal y una hoja de albahaca.
Añade un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
Pica todos los ingredientes hasta obtener una pasta homogénea. Si queda muy espeso, añade más aceite hasta alcanzar la textura deseada.
Coloca una rodaja de berenjena como base.
Añade una rodaja de calabacín y luego una de tomate.
Repite la operación para formar una segunda capa: berenjena, calabacín y tomate.
Coloca una rodaja de mozzarella encima de cada milhoja.
Añade una pequeña cantidad de tapenade sobre la mozzarella (con moderación, ya que tiene un sabor intenso).
Rocía la milhoja con el aceite de albahaca.
Decora con cebollino fresco picado.